Granada

RESUMEN SEMANAL DE ENTRENOS.

Martes, 29. FISIOTERAPEUTA. Trabajamos la rodilla y el psoas, el cual estaba bloqueado y acortaba mi extremidad inferior (derecha..), lo que podría ser uno de los problemas para que los plazos de la recuperación, no sean los inicialmente previstos. Cruzo los dedos.

Miércoles, 30. DENTISTA. Después de pasar por diferentes dentistas y consumir este mes una manita de cajas de augmentine, llegó la hora de erradicar el problema y como decía un amigo comentarista del blog, “muerto el perro, se acabó la rabia” y que razón tenía. Me he quedado en la gloria.

Jueves 31. PODÓLOGO. Me habían hablado muy bien de él, además mi mister prácticamente me obligaba a visitar Albatera. Este año he tenido problemas en el aquiles izquierdo, una fascitis plantar en el derecho, sobre cargas en ambos tibiales además de la tan conocida y más preocupante lesión de la rodilla derecha, por lo que era más que recomendable pasar por sus manos. Tras un examen  muy completo y conocer que tengo unos pies difíciles, me llevé la segunda alegría de la semana, tras el desahogo que sentí al perder la muela la noche anterior. El señor podólogo, divinizó solucionar todas mis lesiones con la colocación de unas plantillas que ya están encargadas pero que no tendré hasta el mes de mayo. Mi mister confía en él y yo confío en mi mister. Suficiente, aunque la ayudita de unas velas nunca está de más, termino de encender la última.

Lunes 4 de abril. TRAUMATÓLO. Mi doctor tras estudiar la resonancia me recomendó un nuevo traumatólogo, pues bien para mañana tengo la cita. Mi rodilla va a ritmo de canción, “un pasito palante, 2 pasitos patrás”. El hecho de que la recuperación sea a modo cangrejo me tiene un tanto desquiciado por lo que intentaré buscar una nueva opinión o valoración para contractarla con las que ya tengo.

   El entreno lo complementé con unas pesas en el gimnasio y con una despedida por Granada, el fin de semana que acaba ya. Digo despedida porque hasta que no se me olvide no vuelvo a visitar la ciudad nazarí, que caos circulatorio, la próxima vez iré en moto (con unas ruedas, como las de la foto). Los parking hacen su agosto durante todo el año y lo de las tapas..., a mi ya me empieza a cansar, ¡pisha!, que es una opinión personal. Ahora, eso si, recomiendo El Rincón del Cofrade, vaya bar más peculiar. Si os gusta la semana Santa y sois creyentes no dudáis en preguntar por él.

Ojo, en  “El rincón del Cofrade”, no se puede fumar.